¿Cómo sé si necesitamos la ayuda de un profesional?
Para muchas personas, acudir a terapia de parejas es como reconocer un fracaso en su relación. Les hace sentir frustradas y, en cierto modo, culpables por no ser capaces de comunicarse y arreglar sus problemas por sí mismos. Todas las parejas pasan por etapas problemáticas en las que se sientes distanciados o en conflicto, pero si estas etapas se suceden con mucha frecuencia o no encontráis la manera de salir de ellas, la ayuda de un profesional puede salvar vuestra relación. La terapia de parejas es un recurso natural y beneficioso para superar un mal momento, entender mejor a tu pareja y aprender a comunicaros para evitar veros en el futuro en la misma situación. Si se dan algunas de estas situaciones, deberíais pedir ayuda a un profesional:
- Tu pareja y tu tenéis un problema que os causa malestar a los dos, pero no sabéis como afrontarlo.
- La sensación de celos está causando que tú y tu pareja os distanciéis y no encontráis la forma de hablar de ello.
- No os sentís cómodos a la hora de tener relaciones sexuales y la falta de ellas está minando vuestra intimidad.
- Habéis perdido la confianza el uno en el otro y no sabéis cómo recuperarla.
Todas estas situaciones llevan, a la larga, a la ruptura de una pareja. Este puede ser un final beneficioso para ambos si quieren dejar la relación, pero estas situaciones se dan también en parejas que se quieren y quieren mantenerse unidas. Para ello, lo mejor es confiar en una psicóloga que pueda aconsejaros las mejores maneras de abordar el problema, que os de la oportunidad de desahogaros y de ejercer la función de mediador e interprete para ayudar a entender al otro.
¿Cómo puede ayudarnos la terapia de pareja?
La terapia de pareja es un espacio en el que hablar libremente, con la presencia de un mediador, acerca de todos los problemas y malentendidos que están minando vuestra relación. Con su ayuda, podéis alcanzar acuerdos y entender mejor el punto de vista de vuestra pareja, así como aprovechar para expresar vuestros propios sentimientos de una manera asertiva y no como un reproche. La terapia también puede ayudaros a aprender cómo enfrentaros a los problemas en el futuro.
Si piensas que tu relación está afrontando una mala pasada y no podéis hacer frente a esta situación por vosotros mismos, pedir ayuda es la mejor opción.